Las start-ups (empresas emergentes) y los emprendedores son el motor del crecimiento económico en Europa, es por ello por lo que uno de los objetivos de la Unión Europea es aumentar el número de emprendedores, apostando por mejorar su formación.
A pesar de que el espíritu empresarial está incluido en los planes de estudios de muchos países de la UE, todavía existe una brecha en los conocimientos y habilidades necesarios, y se sigue sin tener en cuenta las necesidades y demandas de las empresas.
Reconociendo la importancia del espíritu empresarial, el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea ha creado el Entrepreneurship Competence Framework (EntreComp) que define el emprendimiento como una competencia transversal y ofrece una herramienta para ser aplicada a todas las esferas de la vida, incluyendo autónomos, y también a la puesta en marcha de empresas.