Las empresas del sector tecnológico sufren la carencia de soft skills en sus empledaos: pueden ser muy buenos profesionales pero su incapacidad para comunicarse tiene repercursiones negativas.
Por lo tanto, es necesario que los profesionales del mundo tecnológico desarrollen las habilidades necesarias para mejorar su comunicación, ya que, en el entorno del desarrollo de software, la posesión y el uso de soft skills o habilidades blandas aumenta las probabilidades de éxito de la persona, y la ayudan a fortalecer y crecer en su carrera profesional.